El corazón no muere cuando deja de latir; el corazón muere cuando los latidos no tienen sentido.

Cuento contigo. El viento mueve de un lado a otro la arena del desierto que cubre por completo nuestra cama.
Cada vez que sientas que la tristeza te persigue, déjala entrar en tu vida, que con ella aprenderás a ser fuerte. Si la locura decide llamar a tu puerta, no la rechazes, actuar con sensatez es cosa de adultos.
Porque, simplemente, lo que hoy siente tu corazón, mañana lo entenderá tu cabeza-

"Por una mirada, un mundo;
por una sonrisa, un cielo;
por un beso... yo no sé
qué te diera por un beso."