Llevo queriendo terminar con esto desde el día en que empezó, supongo que es una bola que se va a agrandando con el paso del tiempo. Ya no sé que quiero, no sé si hay nada, pero estoy segura de que hay algo.

Sé que es difícil, nunca nadie dijo que fuera a ser tarea fácil. Cada vez que lo intento siento que hay algo que me obliga a echarme hacia  atrás, tal vez el miedo, porque eso que dicen de: -fue lo bonito mientras duró-, quizás tenga algo de sentido.

Dicen que los suspiros son todas aquellas palabras que jamás se dijeron, y tal vez tengan razón.

El sol sigue ahí arriba, significa que tu día aun no ha acabado. Has aclarado tus ideas y sabes lo que merece realmente la pena, asique adelante, corre, vuela si hace falta, lucha por conseguirlo, aun tienes muchas armas, ya solo dependes de tu fuerza de voluntad. Porque no tiene sentido complicarse tanto, a veces pensamos demasiado e incluso peor, buscamos explicaciones innecesarias, en vez de dedicarnos a aquello que realmente queremos.

Y abrí los ojos para ver si estabas, pero ya era demasiado tarde.

Camina a paso firme, con la cabeza bien alta, con la mirada al frente. Por dentro está destrozada, pero no piensa permitir que por fuera se note. Tiene los ánimos por los suelos, pero lo soluciona colocándose unos tacones de 15 centímetros.

La vida le da la espalda, pero ella continua. No le apetece nada, pero sonríe, el tiempo pasa deprisa y no piensa perder ni un segundo. Prefiere quedarse en casa, pero sale con la intención de comerse el mundo.  Porque, al fin y al cabo, si ella no lo hace, nadie más lo hará por ella.

No sueñes por encontrar el amor perfecto. Mejor lucha por un amor que, aun siendo perfecto, te logre hacer soñar.

A veces lo que buscas esta tan cerca que cuesta verlo.

Me dijiste que mirara al frente, que no me preocupara por lo que pasó y que me centrara en lo que pasaba. Que ante todo, supiera esperar,  y no perdiera la esperanza. Pero no hay nada más dulce que romper las reglas.

Desgraciadamente, no suelo hacer caso a los consejos de la gente, ahora mismo me arrepiento de lo que paso e intento no dar importancia a lo que pasa. Y supongo que la esperanza la perdí desde el día en el que no supe esperar.

He de admitir que no pude con ello y me derrumbé. Pero volví, puse buena cara y pensaron que todo marchaba bien. Me faltan explicaciones y me sobran las lágrimas. No hay más que decir, todo tiene un final y no siempre salen las cosas tal y como te las esperabas.

Y que el fin del mundo te pille bailando.

Caigo otra vez en tu juego, en el mundo de la ilusión, de los sueños. Aquellos en los que por el simple hecho de estar contigo, hacen que sean perfectos. Es un sentimiento de impotencia, ya no tienes la capacidad de razonar sobre el pasado, solo te centras en el futuro. Las cosas vienen y van, no hay marcha atrás.

He oido que la única forma de poder olvidar, es el engaño a uno mismo.

Sencillamente decirte que en algunos casos las palabras sobran, en otros se las lleva el viento… e incluso, en la mayoría de los casos, se sobreentienden.

Ven abrázame, necesito tenerte cerca, sentir tu presencia. No te pido nada a cambio, solo que estes conmigo, ese es el trato.

La imposibilidad aparece cuando menos te lo esperas.

Y si equivocarse no fuera una opcion, todo seria demasiado fácil. Los errores son los que ponen esa pizquita de riesgo a las cosas, en el fondo, acaban terminando con la monotonia del día a día.
Dicen que de los errores se aprende, pero parece que en mi caso ocurre todo lo contrario.
Tal vez tenté demasiado a la suerte creyendo que lo imposible podría llegar a ocurrir, un error que comenten las soñadoras, supongo.
Pero no me arrepiento de nada, tú has sido mi prioridad hasta el día de hoy, pero quien sabe, quizás mañana no piense lo mismo.